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Trump dijo que Putin era un ‘genio’ y ahora lo quiere negar | Opinión

El expresidente estadounidense Donald J. Trump dio marcha atrás el pasado miércoles en sus comentarios de hace un mes sobre el mandatario ruso, Vladimir Putin.

Trump, que muy probablemente aspirará de nuevo a la Casa Blanca en 2024, negó haber llamado “genio” a Putin cuando Rusia estaba a punto de invadir Ucrania.

En una declaración emitida el miércoles, Trump afirmó que usó la palabra “genio” para referirse a la estrategia militar de Putin, porque en ese momento pensó que la concentración de tropas en la frontera con Ucrania le permitiría al líder ruso negociar un acuerdo muy favorable para su país. Ahora manifestó que la invasión fue una decisión lamentable.

Trump no ignora que una vasta mayoría de los norteamericanos y de los políticos de los dos grandes partidos, el demócrata y el republicano, condenan la invasión contra la exrepública soviética.

En su declaración, Trump buscó ponerse del lado de la opinión pública. Además, siguiendo su instinto de competencia, no perdió tiempo y aprovechó la ocasión para lanzar un dardo contra el presidente demócrata Joe Biden, quien lo derrotó por amplio margen en las elecciones de 2020.

“Lamentablemente, y trágicamente —dijo el ex mandatario republicano—, Putin fue demasiado lejos en su actuación ante la débil política exterior del gobierno de Biden”.

Trump, en efecto, no dijo textualmente que Putin era un genio. Pero sí expresó en un programa de televisión que la decisión de Putin de declarar independiente la parte oriental de Ucrania —donde se concentra una numerosa población de origen ruso— era “genial” (“this is genius”, dijo en inglés).

Desde los violentos disturbios del Euromaidán en 2014, que dieron lugar a la destitución del presidente ucraniano Víctor Yanukóvich, las tensiones entre Moscú y Kiev han ido en aumento. Cierto: los habitantes de origen ruso en el este de Ucrania han sufrido la hostilidad del gobierno y de la ultraderecha nacionalista y grupos neonazis. Pero eso no justifica la invasión lanzada por Putin, que está dejando un país arrasado, ha causado innumerables muertes de civiles y ha generado el éxodo de refugiados más cuantioso en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.

También este miércoles, José Mujica, ex presidente de Uruguay y exguerrillero tupamaro, dijo: “Todavía vivimos en la prehistoria. Queremos arreglar la historia a guerras. Una verdadera desgracia por todos lados, por un lado y por el otro, por todos lados. Es increíble que no hayan podido negociar, es increíble… Y ahora van a negociar, después que destrozaron un país”.

Propiciar la guerra nunca es genial, como expresó Trump, sino una desgracia. Si por fin las negociaciones entabladas la semana pasada en Turquía dan fruto, Ucrania renuncia a entrar en la OTAN, y Putin detiene su brutal agresión mientras ambas naciones se dan un plazo de 15 años para resolver la situación en el Donbás, se habrá dado un paso salvador.

Pero no podemos olvidar el triste saldo de víctimas humanas que deja el conflicto, un conflicto que nunca debió haber ocurrido.

Andrés Hernández Alende es un escritor, periodista cubanoamericano y ex editor de la sección de Opinión de el Nuevo Herald. Su novela más reciente, “La espada macedonia”, fue publicada por Mundiediciones.

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