Ciencia

El mayor estudio sobre esperanza de vida revela qué razas de gatos viven más y menos

Contar con datos e información fiable sobre esperanza de vida o mortalidad es esencial para comprender mejor la salud y el bienestar de las personas. Los investigadores realizan de manera sistemática y recurrente este tipo de estudios, ya sea en regiones concretas o poblaciones más amplias, con el objetivo de indagar y analizar los diferentes motivos por los que en algunas regiones existe una mayor mortalidad, para determinar qué condiciones favorecen una mayor esperanza de vida o para detectar posibles amenazas a la salud pública.

Sin embargo, este tipo de estudios no son muy frecuentes en otras especies. En el caso de seres humanos normalmente se lleva un registro muy detallado del momento de la muerte, causas, etc. Los investigadores pueden acudir a tablas oficiales, historiales médicos, bases de datos… todo un abanico de fuentes que se reduce mucho cuando se trata de realizar esos mismos estudios en animales, incluso los más cercanos a nosotros.

Hace tan solo unos días, un equipo internacional de patobiólogos ha publicado el mayor estudio sobre el tema creando una tabla de esperanza de vida para las diferentes razas de gatos con datos procedentes de casi 8.000 fallecimientos registrados en Reino Unido, entre el 01 de enero de 2019 y el 31 de marzo de 2021. El análisis de este jugoso cuerpo de datos ha confirmado muchas cosas que ya sabíamos pero también nos deja algunas curiosidades sorprendentes e inesperadas.

Al iniciar el análisis de los datos recogidos, el primer punto fue estimar que la esperanza de vida de los gatos en general es de casi doce años (11,74 años) y que, al igual que ocurre en humanos, los machos viven menos tiempo que las hembras, en promedio 16 meses menos. Por otro lado, el estudio muestra que los gatos macho castrados vivieron, en promedio, un año más (1.07 años) en comparación con los gatos que no lo estaban.

Esperanza de vida y probabilidad de muerte según los datos del estudio | Teng, Kendy Tzu-yun, et al. Journal of Feline Medicine and Surgery, (2024) DOI:10.1177/1098612X241234556.
Esperanza de vida y probabilidad de muerte según los datos del estudio | Teng, Kendy Tzu-yun, et al. Journal of Feline Medicine and Surgery, (2024) DOI:10.1177/1098612X241234556.

En relación a las diferentes razas de gatos las diferencias son sustanciales y así encontramos al campeón de la longevidad, el gato birmano, con una esperanza de vida de 14,42 años en contraposición con la raza Sphynx cuya longevidad es la más corta, mostrando una esperanza de vida de tan solo sólo 6,68 años.

Al igual que en los seres humanos el estudio confirma que el estilo de vida que ha llevado el gato tiene un impacto importante en su esperanza de vida. Factores como el ejercicio, la alimentación, la castración o el tipo de reproducción con el que se generan las diferentes razas también influyen. Por ejemplo, los gatos con sobrepeso muestran una menor longevidad y las razas como la del gato esfinge son un “excelente ejemplo de cría que ha dado lugar a una mascota muy popular, pero poco saludable”. De hecho, el estudio apunta a que los gatos sin pelo (criados para permitir que las personas con alergias al pelo tengan un gato) tienen un mayor riesgo de sufrir varios tipos diferentes de enfermedades, muchas de las cuales pueden provocar una muerte prematura.

Otro aspecto tratado con profundidad en el estudio es la diferencia entre gatos de “pura raza” y gatos “mestizos” donde la esperanza de los primeros, los denominados mestizos o callejeros, se situó en 11.89 años, casi un año y medio más que la de los gatos de pura raza. Esta conclusión viene a fortalecer los resultados de un estudio anterior, publicado en el verano del año pasado, que exploraba los riesgos para la salud que enfrentan los gatos de diferentes razas, utilizando información de veterinarias, pólizas y reclamaciones de seguros. En aquel estudio se concluía que los gatos de “pura raza” poseían un mayor riesgo relativo que incluía problemas reproductivos, cardiopatías, complicaciones en la cirugía, infecciones de las vías respiratorias o enfermedades inmunitarias.

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